La afición mexicana no estaba tan convencida de apoyar a su Selección en los últimos partidos. Las derrotas y la falta de ideas fueron el detonante, pero un tal Raúl Jimenez está de regreso y promete devolver esa alegría.
Ganarle a tu eterno rival trae alegría, paz y sobretodo orgullo y eso es lo que le hacía falta a los aficionados mexicanos con su Selección en los últimos partidos.
Pero tras la victoria ante Estados Unidos -después de 5 años- y el nivel mostrado por jugadores como Raúl Jimenez, la cosa puede cambiar y el papel en el Mundial de 2026 puede tener otro resultado, distinto al que todos creían que olía a desastre.